La posibilidad de que en Argentina se establezca por decreto presidencial la propina obligatoria requiere revisar qué ocurre en otros países del mundo en la materia. En la mayoría no es obligatorio aunque viene incluido en la cuenta, mientras que en otros directamente está mal visto dar un porcentaje extra de lo consumido en el local.
Según trascendidos, el presidente Javier Milei firmaría un decreto que “mejorará los salarios del sector gastronómico” y que solucionaría el tema de la falta de efectivo, que muchas veces deja a los mozos sin propina.
El ministro de Desregulación y Transformación del Estado de la Nación, Federico Sturzenegger, sería el encargado de llevar adelante este viejo anhelo del titular de Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la Argentina, Luis Barrionuevo.
A continuación, un panorama por algunos países del mundo
En Suiza es obligatorio dejar propina. La misma es del 15% del total de la facturación y se la conoce como «tasa de servicio». De hecho, por las consumiciones que se dan en restaurantes lujosos los clientes dejan un porcentaje extra al contemplado por normativa.
La propina en Francia es obligatoria en bares y restaurantes, y se la conoce como service compris (tasa de servicio). Al igual que en Suiza, representa el 15% de la consumición total en el establecimiento.
El service included (servicio incluido) en el Reino Unido es un concepto que no tiene obligatoriedad pero que se incluye en la tarifa final. Este concepto va del 10 al 15 por ciento del total, por lo que la propina puede variar según el lugar.
La propina en Portugal no es del todo obligatoria pero sí se agrega a la factura una vez que se pide la cuenta. La misma ronda el 10% de la consumición, aunque en los establecimientos que no suman este concepto a la tarifa final se suele dejar uno o dos euros.
Las contribuciones en forma de propina en Italia se suman a la cuenta como «tasa de servicio». La misma está entre el 10 y el 15 por ciento del total de la consumición. En el caso de que la cuenta no venga con el concepto incluido, la retribución extra se sitúa en el mismo rango.
Al igual que en Italia, la propina en Países Bajos viene añadida a la factura y también va del 10 al 15 por ciento. De todos modos, lo habitual es redondear la cifra hacia arriba al margen de que el porcentaje de esa contribución extra sea menor al 10%.
El único país en Sudamérica en el que la propina es obligatoria es Brasil. En el vecino país se incluye este concepto como «tasa de servicio» y es del 10% del total de la consumición.
Muchas veces, los comensales dejan propinas en los bares y restaurantes para mostrar agradecimiento por la atención recibida. Pero este gesto, en algunos países, está mal visto.
En el caso de Japón, los operadores turísticos sugieren no dejar propina. Son poco comunes y es una situación que pone incómodos a los mozos. Incluso hay quienes mencionan que es común verlos perseguir a los clientes que dejaron algún billete en la mesa a modo de recompensa por la buena atención recibida.
Cerca de allí, en China, también está mal visto dejar propina y hasta llegaron a estar prohibidas ya que una de las máximas en el gigante asiático es la igualdad entre todos los ciudadanos.
Dejar propina en China puede ser tomado como un gesto de intento de superioridad sobre otro y en ocasiones puede tomarse directamente como un indicio de mala educación
