River Plate está a punto de concretar su primera incorporación en este mercado de pases: Maximiliano Salas. El delantero, que ya le dio el visto bueno a Marcelo Gallardo, tiene todo listo para ejecutar la cláusula de rescisión de su contrato con Racing, que asciende a ocho millones de euros. Una vez hecho el depósito, el zurdo quedará en libertad de acción y podrá firmar con el Millonario.
En Núñez esperan que la operación se cierre en las próximas horas para que el jugador pueda sumarse cuanto antes a la pretemporada, que arranca este miércoles en el predio de Ezeiza. Si los plazos lo permiten, Salas se realizaría la revisión médica en las próximas 48 horas y ya trabajaría junto al plantel. Si no se llega a tiempo, lo haría el jueves.
El fichaje no está exento de controversia. Salas tenía un acuerdo verbal con Racing para renovar su contrato hasta 2028 con una mejora salarial. Sin embargo, el llamado de Gallardo cambió el rumbo: el delantero dio marcha atrás y optó por aprovechar su cláusula de salida para pasar a River.
Esta situación generó malestar en el mundo Racing. Si bien desde la dirigencia aún no hubo declaraciones oficiales, los hinchas expresaron su enojo durante el amistoso del sábado ante Olimpia en Paraguay, donde silbaron al jugador y colgaron pasacalles en su contra. Gallardo también fue blanco de críticas por parte de la parcialidad académica, aunque el DT aclaró que no recibió ningún reproche de Víctor Blanco, presidente de Racing, con quien mantiene una buena relación.
Más allá del clima tenso, en River ya están enfocados en cerrar el arribo de Salas, uno de los nombres que Gallardo había solicitado para reforzar el ataque con vistas al gran objetivo del semestre: la Copa Libertadores. La decisión de avanzar a fondo con su cláusula, poco habitual entre clubes del fútbol argentino, marca la determinación del club de
