El fútbol mundial está de duelo tras confirmarse la trágica muerte del delantero portugués Diogo Jota, de 28 años, y su hermano André Silva, también futbolista profesional. El fatal accidente ocurrió en la madrugada del jueves en la Autovía A-52, a la altura de Zamora, en el noroeste de España.
Los hermanos viajaban en un Lamborghini que, según las primeras pericias, habría sufrido un reventón de neumático mientras realizaba un adelantamiento. El auto se salió de la calzada, impactó violentamente y se incendió. Bomberos de la localidad de Rionegro del Puente lograron extinguir el fuego, pero ambos ocupantes ya habían perdido la vida. Las autoridades confirmaron que el vehículo quedó completamente calcinado.
El impacto emocional fue inmediato. Jota, que acababa de consagrarse campeón de la Premier League con Liverpool y de la UEFA Nations League con Portugal, vivía uno de los momentos más felices de su vida: hacía apenas diez días había celebrado su boda con Rute Cardoso, con quien tenía tres hijos pequeños. Fue ella quien tuvo que identificar los cuerpos en el lugar del accidente.
Según trascendió, los hermanos tenían previsto dormir en Benavente y continuar al día siguiente hacia Santander, donde tomarían un ferry rumbo a Portsmouth, Inglaterra.
La noticia generó una ola de reacciones en el mundo del deporte. Cristiano Ronaldo, compañero de Jota en la selección, fue uno de los primeros en expresar su pesar: “No tiene sentido. Estábamos juntos hace nada… Descansen en paz, Diogo y André”. El Liverpool también se manifestó oficialmente: “Estamos devastados. Diogo era parte de nuestra familia. Pedimos respeto para sus seres queridos en este momento de dolor”.
Diogo Jota, nacido en Massarelos en 1996, había construido una destacada carrera en el fútbol europeo. Debutó en Paços de Ferreira, pasó por el Atlético de Madrid, Porto y Wolverhampton, donde fue figura clave en el ascenso a la Premier League. En 2020 llegó al Liverpool, donde marcó 65 goles en 182 partidos y ganó varios títulos bajo la dirección de Jürgen Klopp.
Con la selección portuguesa disputó la Euro 2020 y el Mundial de Qatar. Aunque las lesiones lo alejaron en algunos momentos, jugó 49 partidos con la camiseta nacional y logró dos títulos de Nations League, el último en junio de este año.
Su hermano, André Silva, jugaba en el Futebol Clube Penafiel, equipo de la segunda división lusa.
El fútbol despide a dos vidas jóvenes, truncadas en plena plenitud, y recuerda el legado de un jugador talentoso, querido y respetado dentro y fuera de la cancha.