El índice de precios al consumidor correspondiente a octubre habría mostrado una leve aceleración respecto del mes anterior, con un incremento que, según estimaciones privadas, volvería a ubicarse por encima del 2% mensual, en línea con la tendencia de septiembre.
Los cálculos preliminares anticipan una suba cercana al 2,2%, mientras que la variación acumulada en los últimos doce meses se habría reducido levemente, pasando del 30,3% al 29,3%.
De confirmarse estos valores, la inflación mantendría un ritmo contenido pero aún sostenido, en un contexto de ajustes moderados en la mayoría de los rubros.
Sectores con mayores incrementos
Durante octubre se destacaron aumentos en bienes y servicios personales, así como en alimentos y bebidas, que mostraron un alza promedio del 1,4%.
Dentro de este último grupo, los panificados y las carnes fueron los productos con mayor movimiento, mientras que los aceites, frutas y lácteos presentaron subas más moderadas y las verduras incluso registraron bajas.
También se verificaron incrementos en transporte y comunicaciones, educación, bienes y servicios varios, y salud, con variaciones que oscilaron entre el 2% y el 3,5%.
En el segmento automotor, los vehículos 0 km aumentaron alrededor de 5,6%, y los seguros y estacionamientos tuvieron alzas cercanas al 4,4%.
Tendencias y perspectivas
Los relevamientos privados marcan que la inflación núcleo —que excluye precios regulados y estacionales— se mantuvo cerca del 2,2%, reflejando cierta estabilidad en los precios básicos de la economía.
Algunos análisis señalan, además, que la presión inflacionaria del mes respondió principalmente al comportamiento de los alimentos, el transporte y ciertos servicios vinculados al consumo cotidiano.
En cuanto a las proyecciones anuales, las estimaciones apuntan a que el incremento de precios acumulado en 2025 rondaría el 30%, en un escenario de paulatina desaceleración.